Ghana eliminó a Estados Unidos y avanzó a cuartos
El elenco africano superó por 2-1 a los norteamericanos en tiempo suplementario y se transformó en el rival de Uruguay. Boateng y Gyan anotaron para el vencedor, mientras que Donovan, de penal, puso el empate transitorio.
Era uno de los partidos de octavos de final con resultado incierto, porque los dos habían mostrado cosas interesantes en la fase de grupos y porque no tenían grandes antecedentes en los mundiales. Finalmente, Ghana fue un poco más en los 120 minutos, se impuso por 2-1 en tiempo suplementario y será el rival de Uruguay en cuartos.
El conjunto norteamericano avisó a los cuatro minutos con un disparo de Clint Dempsey que el arquero Richard Kingson controló sin demasiados inconvenientes. Pero sólo fue un espejismo, ya que los africanos impusieron rápidamente sus condiciones. A los cinco, Kevin Prince Boateng encaró ante dos defensores, se acomodó, le dio de zurda contra el primer palo y clavó el 1-0.
Más allá del gol, el equipo conducido por Milovan Rajevac fue superior en la primera etapa porque se mostró preciso y veloz con la pelota al pie, se paró más adelante en el campo y generó las mejores ocasiones. A los 17, Asamoah Gyan preocupó con un tiro libre que tapó Tim Howard y a los 36, ganó con potencia por la izquierda y forzó otra buena reacción del uno.
Anthony Annan y Jonathan Mensah fueron clave en el mediocampo para mover los hilos ghaneses y para complicar la salida cómoda de los estadounidenses, que estuvieron lentos de tres cuartos hacia arriba y poco lograron hacer -Landon Donovan pasó desapercibido-. En la única chance, a los 34, Robbie Findley recibió en el área, le pegó rasante y Kingson evitó el empate con sus piernas.
Estados Unidos mejoró muchísimo en el complemento a partir del ingreso de Feilhaber, quien al minuto quedó mano a mano y perdió con el arquero. Ghana, por su parte, se retrasó, dejó de generar peligro, más allá de alguna corrida solitaria de contra, y le entregó el control a su rival. A los 15, Mensah lo bajó en el área a Dempsey y Donovan cambió el penal por gol.
Con la igualdad, el elenco de Bob Bradley mantuvo su posición en el campo y estuvo muy cerca de ganarlo, primero con un zurdazo de su hijo Michael, que murió en las manos de Kingson, y luego con un remate de Altidor que superó al arquero y se fue extremadamente cerca. Sobre el cierre, ninguno arriesgó, tocaron la pelota en el medio y se fueron al suplementario.
Parecía que el equipo norteamericano estaba mejor perfilado para afrontar el tiempo extra, pero los africanos sorprendieron a los tres minutos. Gyan arrancó a pura potencia, aguantó el empellón de Carlos Bocanegra y decretó el 2-1 con un tremendo zurdazo. Estados Unidos lo tuvo en un cabezazo de Edu que se perdió cerca, pero luego no logró generar situaciones.
Ghana abandonó su búsqueda en ataque, pero los de Bradley nunca lo metieron contra un arco, más allá de los minutos finales, cuando aprovechó cualquier infracción para tirarla al área. Pero el arquero africano respondió muy bien con los puños en cada envió y frustró cualquier intento del rival. Fue de Ghana, que ahora será el escollo de Uruguay.
El elenco africano superó por 2-1 a los norteamericanos en tiempo suplementario y se transformó en el rival de Uruguay. Boateng y Gyan anotaron para el vencedor, mientras que Donovan, de penal, puso el empate transitorio.
Era uno de los partidos de octavos de final con resultado incierto, porque los dos habían mostrado cosas interesantes en la fase de grupos y porque no tenían grandes antecedentes en los mundiales. Finalmente, Ghana fue un poco más en los 120 minutos, se impuso por 2-1 en tiempo suplementario y será el rival de Uruguay en cuartos.
El conjunto norteamericano avisó a los cuatro minutos con un disparo de Clint Dempsey que el arquero Richard Kingson controló sin demasiados inconvenientes. Pero sólo fue un espejismo, ya que los africanos impusieron rápidamente sus condiciones. A los cinco, Kevin Prince Boateng encaró ante dos defensores, se acomodó, le dio de zurda contra el primer palo y clavó el 1-0.
Más allá del gol, el equipo conducido por Milovan Rajevac fue superior en la primera etapa porque se mostró preciso y veloz con la pelota al pie, se paró más adelante en el campo y generó las mejores ocasiones. A los 17, Asamoah Gyan preocupó con un tiro libre que tapó Tim Howard y a los 36, ganó con potencia por la izquierda y forzó otra buena reacción del uno.
Anthony Annan y Jonathan Mensah fueron clave en el mediocampo para mover los hilos ghaneses y para complicar la salida cómoda de los estadounidenses, que estuvieron lentos de tres cuartos hacia arriba y poco lograron hacer -Landon Donovan pasó desapercibido-. En la única chance, a los 34, Robbie Findley recibió en el área, le pegó rasante y Kingson evitó el empate con sus piernas.
Estados Unidos mejoró muchísimo en el complemento a partir del ingreso de Feilhaber, quien al minuto quedó mano a mano y perdió con el arquero. Ghana, por su parte, se retrasó, dejó de generar peligro, más allá de alguna corrida solitaria de contra, y le entregó el control a su rival. A los 15, Mensah lo bajó en el área a Dempsey y Donovan cambió el penal por gol.
Con la igualdad, el elenco de Bob Bradley mantuvo su posición en el campo y estuvo muy cerca de ganarlo, primero con un zurdazo de su hijo Michael, que murió en las manos de Kingson, y luego con un remate de Altidor que superó al arquero y se fue extremadamente cerca. Sobre el cierre, ninguno arriesgó, tocaron la pelota en el medio y se fueron al suplementario.
Parecía que el equipo norteamericano estaba mejor perfilado para afrontar el tiempo extra, pero los africanos sorprendieron a los tres minutos. Gyan arrancó a pura potencia, aguantó el empellón de Carlos Bocanegra y decretó el 2-1 con un tremendo zurdazo. Estados Unidos lo tuvo en un cabezazo de Edu que se perdió cerca, pero luego no logró generar situaciones.
Ghana abandonó su búsqueda en ataque, pero los de Bradley nunca lo metieron contra un arco, más allá de los minutos finales, cuando aprovechó cualquier infracción para tirarla al área. Pero el arquero africano respondió muy bien con los puños en cada envió y frustró cualquier intento del rival. Fue de Ghana, que ahora será el escollo de Uruguay.
