Cada quien sabrá !!!
Disfrutando de lo q realmente vale la pena : mis vicios
Hoy más q nunca
Despúes de ver este blog ,
De esto no tengo dudas
Cuando la vida te niega una cosa ... es porque te tiene preparado algo mejor . Lo cual no tengo dudas .
lunes, 5 de abril de 2010
Fecha 12 : Atl. Tucumán 0 Racing 0 ( suspendido )
Racing se salvó ante Atlético y la lluvia frenó el partido
Los tucumanos y la Academia jugaron 22 minutos bajo un diluvio, en los que Jorge De Olivera se convirtió en héroe al atajarle un penal a Luis Rodríguez (PT 16m). Luego, Gabriel Favale se vio obligado a suspender el encuentro.
Un empate 0-0 inconcluso con ganadores y perdedores en un mix de emociones tuvo lugar este viernes en los escasos 22 minutos que se pudieron jugar en Tucumán del encuentro entre Atlético y Racing. Ganó La Academia con un penal atajado que lo salvó de tener que remar desde abajo y el Decano la chance de atesorar una ventaja que alimentaba su esperanza de mantener la categoría. Y, cuando la lluvia terminó de encharcar el campo de juego y de convencer a Gabriel Favale de que no se podía seguir, perdieron los hinchas, sobre todo los de Racing que habían viajado a seguir a su equipo.El juego había arrancado conuna chance clara para la visita, cuando Gabriel Hauche recibió por derecha y definió afuera. Pero después, a medida que el agua iba cobrando protagonismo e impidiendo un desarrollo normal, las cosas se emparejaron de la mano de las imprecisiones.Hasta que a los 16 Favale cobró un agarrrón en un centro a Juan Azconzábal en el área y Luis Rodríguez se dispuso a ajusticiar a Jorge De Olivera. Pero el arquero se agrandó arrojándose a su derecha y con las piernas despejó el tiro que ilusionaba a los de Mario Gómez. Y las cosas seguían como al principio. Poco después, a los 22, la historia conocida. La cortina de lluvia y la suspensión acertada para estirar la definición a una jornada futura. Mientras tanto, Atlético sigue sin ganar y Racing fuera de Promoción.
Los tucumanos y la Academia jugaron 22 minutos bajo un diluvio, en los que Jorge De Olivera se convirtió en héroe al atajarle un penal a Luis Rodríguez (PT 16m). Luego, Gabriel Favale se vio obligado a suspender el encuentro.
Un empate 0-0 inconcluso con ganadores y perdedores en un mix de emociones tuvo lugar este viernes en los escasos 22 minutos que se pudieron jugar en Tucumán del encuentro entre Atlético y Racing. Ganó La Academia con un penal atajado que lo salvó de tener que remar desde abajo y el Decano la chance de atesorar una ventaja que alimentaba su esperanza de mantener la categoría. Y, cuando la lluvia terminó de encharcar el campo de juego y de convencer a Gabriel Favale de que no se podía seguir, perdieron los hinchas, sobre todo los de Racing que habían viajado a seguir a su equipo.El juego había arrancado conuna chance clara para la visita, cuando Gabriel Hauche recibió por derecha y definió afuera. Pero después, a medida que el agua iba cobrando protagonismo e impidiendo un desarrollo normal, las cosas se emparejaron de la mano de las imprecisiones.Hasta que a los 16 Favale cobró un agarrrón en un centro a Juan Azconzábal en el área y Luis Rodríguez se dispuso a ajusticiar a Jorge De Olivera. Pero el arquero se agrandó arrojándose a su derecha y con las piernas despejó el tiro que ilusionaba a los de Mario Gómez. Y las cosas seguían como al principio. Poco después, a los 22, la historia conocida. La cortina de lluvia y la suspensión acertada para estirar la definición a una jornada futura. Mientras tanto, Atlético sigue sin ganar y Racing fuera de Promoción.
Fecha 12 : Newell´s 0 Tigre 2
Tigre fue oportunista y venció a Newell´s en Rosario
El Matador aprovechó mejor sus chances y le ganó 2-0 a la Lepra, que terminó con uno menos por la roja a Vangioni (PT 30m). Los tantos los marcaron Garat (PT 4m) y Brian Rodríguez (ST 26m). Los de Caruso Lombardi volvieron a festejar en la ciudad santafesina, tal como lo habían hecho en la segunda fecha ante Central.
Tigre le aplicó una letal dosis de contundencia a Newell´s y le ganó 2-0 en el estadio Marcelo Bielsa, en la continuación de la duodécima fecha del Clausura. Los de Victoria apostaron por el contragolpe, exhibieron una notable solidez defensiva y le sacaron réditos a dos distracciones defensivas de un rival impotente. A su vez, Ricardo Caruso Lombardi ratificó que tiene la receta para festejar en la ciudad santafesina, donde también había derrotado a Central en la segunda jornada. Fiel a su estilo pragmático, el Matador le cedió la iniciativa a su rival en el arranque y esperó agazapado para lastimar de contragolpe. Esa partitura que había diseñado Caruso Lombardi se potenció mucho más cuando a los cuatro minutos llegó la apertura del marcador: Brian Rodríguez envió un tiro libre desde la izquierda y Juan Pablo Garat (que a último momento había reemplazado a Damián Leyes) conectó la pelota con un soberbio cabezazo. Sin ningún tipo de merecimiento, el conjunto visitante se puso en ventaja con una gran dosis de oportunismo. A Newell´s no le quedó otra alternativa que adelantarse e ir a la carga por el empate, pero jamás pudo encontrar la fórmula para destruir a la sólida defensa de Tigre. El paraguayo Estigarribia se movió por todo el campo buscando sociedades que nunca halló. Aun así, la Lepra coqueteó con el empate mediante sendos cabezazos de Alayes y Fideleff. En definitiva, las jugadas de pelota detenida fueron la única vía potable que halló el local para poner en aprietos a su rival. Los problemas para los rosarinos se acrecentaron a los 30 minutos, cuando Vangioni vio la roja directa por un brusco planchazo contra el uruguayo Ribair Rodríguez. A Tigre se le dibujó una sonrisa ancha en el rostro porque, pese a que tenía a sus dos delanteros muy aislados y atacaba poco, el partido parecía simplificársele aún más. A poco del entretiempo, el palo colaboró con Islas para evitar el empate de Boghossian, que había recibido un centro desde la izquierda de Estigarribia. En los primeros segundos del complemento, Tigre estuvo a punto de ajusticiar por segunda vez a Peratta. Blanco hizo la diagonal al área, paró un centro con el pecho y sacó un zurdazo que el arquero controló con un rebote. Unos minutos después, Islas debió exigirse para enviar al córner un disparo de Torres que tenía como destino la red. Luego de ese par de emociones, el partido se sumergió en una mediocridad absoluta. Hasta que el Matador disparó de nuevo de la mano del uruguayo Brian Rodríguez, que empujó en total soledad un centro por derecha del ingresado Pasini a los 26 minutos. A pesar de no tener la posesión de la pelota, Tigre exhibió una contundencia inapelable que ahondó la confusión de Newell´s. La granítica estructura defensiva fue una muralla muy alta para un Newell´s que apenas pudo esgrimir rasguños. El pitazo final del árbitro Giannini selló otro golpe al corazón de la gente leprosa, que es testigo del declive del subcampeón del Apertura. Por su parte, Tigre volvió a sonreír después de la goleada ante Boca.
El Matador aprovechó mejor sus chances y le ganó 2-0 a la Lepra, que terminó con uno menos por la roja a Vangioni (PT 30m). Los tantos los marcaron Garat (PT 4m) y Brian Rodríguez (ST 26m). Los de Caruso Lombardi volvieron a festejar en la ciudad santafesina, tal como lo habían hecho en la segunda fecha ante Central.
Tigre le aplicó una letal dosis de contundencia a Newell´s y le ganó 2-0 en el estadio Marcelo Bielsa, en la continuación de la duodécima fecha del Clausura. Los de Victoria apostaron por el contragolpe, exhibieron una notable solidez defensiva y le sacaron réditos a dos distracciones defensivas de un rival impotente. A su vez, Ricardo Caruso Lombardi ratificó que tiene la receta para festejar en la ciudad santafesina, donde también había derrotado a Central en la segunda jornada. Fiel a su estilo pragmático, el Matador le cedió la iniciativa a su rival en el arranque y esperó agazapado para lastimar de contragolpe. Esa partitura que había diseñado Caruso Lombardi se potenció mucho más cuando a los cuatro minutos llegó la apertura del marcador: Brian Rodríguez envió un tiro libre desde la izquierda y Juan Pablo Garat (que a último momento había reemplazado a Damián Leyes) conectó la pelota con un soberbio cabezazo. Sin ningún tipo de merecimiento, el conjunto visitante se puso en ventaja con una gran dosis de oportunismo. A Newell´s no le quedó otra alternativa que adelantarse e ir a la carga por el empate, pero jamás pudo encontrar la fórmula para destruir a la sólida defensa de Tigre. El paraguayo Estigarribia se movió por todo el campo buscando sociedades que nunca halló. Aun así, la Lepra coqueteó con el empate mediante sendos cabezazos de Alayes y Fideleff. En definitiva, las jugadas de pelota detenida fueron la única vía potable que halló el local para poner en aprietos a su rival. Los problemas para los rosarinos se acrecentaron a los 30 minutos, cuando Vangioni vio la roja directa por un brusco planchazo contra el uruguayo Ribair Rodríguez. A Tigre se le dibujó una sonrisa ancha en el rostro porque, pese a que tenía a sus dos delanteros muy aislados y atacaba poco, el partido parecía simplificársele aún más. A poco del entretiempo, el palo colaboró con Islas para evitar el empate de Boghossian, que había recibido un centro desde la izquierda de Estigarribia. En los primeros segundos del complemento, Tigre estuvo a punto de ajusticiar por segunda vez a Peratta. Blanco hizo la diagonal al área, paró un centro con el pecho y sacó un zurdazo que el arquero controló con un rebote. Unos minutos después, Islas debió exigirse para enviar al córner un disparo de Torres que tenía como destino la red. Luego de ese par de emociones, el partido se sumergió en una mediocridad absoluta. Hasta que el Matador disparó de nuevo de la mano del uruguayo Brian Rodríguez, que empujó en total soledad un centro por derecha del ingresado Pasini a los 26 minutos. A pesar de no tener la posesión de la pelota, Tigre exhibió una contundencia inapelable que ahondó la confusión de Newell´s. La granítica estructura defensiva fue una muralla muy alta para un Newell´s que apenas pudo esgrimir rasguños. El pitazo final del árbitro Giannini selló otro golpe al corazón de la gente leprosa, que es testigo del declive del subcampeón del Apertura. Por su parte, Tigre volvió a sonreír después de la goleada ante Boca.
Fecha 12 : Lanús 1 River 0
Blanco oscureció un poco más el panorama de River
El mediocampista (PT 40m) anotó el único tanto con el que el Granate superó como local al Millonario, en el cierre de la duodécima fecha. El dueño de casa fue mucho más y desperdició chances muy claras. El equipo de Astrada volvió a dejar una pálida imagen.
Siempre se puede estar peor. River volvió a dejar una imagen muy pobre en la duodécima fecha del torneo Clausura y sufrió su tercera derrota consecutiva, esta vez frente a Lanús, en la Fortaleza y por 1-0. ¿Resultado justo? No. El equipo de Zubeldía debería haber anotado al menos un gol más ante un rival sin juego colectivo ni arrestos individuales. El elenco granate tomó rápidamente la iniciativa en el arranque del encuentro y comenzó a generar movimientos interesantes en ataque desde los pies de Blanco, inquieto y veloz sobre el sector izquierdo, y a partir de la movilidad del juvenil Leandro Díaz. Ya a los cuatro minutos, el mediocampista tiró un centro a media altura y Cabral evitó el primero en el área chica. Por su parte, el Millonario mostró los mismos problemas: en ataque generó muy poco, en el medio careció de presión y precisión y atrás acumuló errores garrafales. Justamente, a los diez, la última línea salió mal y Salcedo la tiró por arriba. Y a los 12, falló nuevamente la zaga, Salcedo quedó mano a mano con Vega y, en lugar de definir, se la entregó a Díaz, quien estaba adelantado. Al conjunto visitante le costó hacer equilibrio en cada sector de la cancha y el local generó riesgo tanto por derecha como por izquierda. Además, probó con algunos remates de larga distancia de Díaz, en dos ocasiones, y de Pizarro, aunque sin suerte. River estaba para el cachetazo y Zubeldía se lamentaba desde el banco por las oportunidades desperdiciadas. Sin embargo, el fútbol se encargó de ponerle justicia al marcador a los 40. Aguirre metió un muy buen centro desde la derecha, Blanco saltó absolutamente solo en el área y cabeceó al arco sin tanta potencia, Vega dio un rebote corto e injustificado y el 10, como si estuviera en un entrenamiento, tomó nuevamente el balón y definió ante la atenta mirada de los defensores. Lanús bajó la intensidad en el comienzo del segundo periodo y perdió esta frescura que había mostrado en la primera parte. Por eso, el Millonario se acomodó mejor, adelantó sus líneas y se acercó al área de Marchesín. Pero sólo se acercó, porque le costó muchísimo encontrar precisión en tres cuartos y poner cara a cara a algún jugador de ataque. A los 16, Funes Mori aprovechó una mala salida de la defensa local y encaró sin marca, pero se apuró y finalmente remató sin dirección desde la puerta del área. El Granate eligió atrincherarse y aprovechar con la velocidad de sus hombres de punta los espacios que dejaba el elenco de Núñez. Por eso, tuvo las mejores ocasiones. A los 35, Velázquez llegó hasta el fondo y tiró un excelente centro para la llegada en absoluta soledad de Salcedo, quien le dio de derecha y estrelló la pelota en el poste. Y a los 39, Blanco se escapó entre los centrales, se perfiló para su pierna más hábil y la tiró muy lejos ante la salida de Vega. Lanús no lo definía y sufría, únicamente porque sobre el final se replegó demasiado. El conjunto de Astrada fue, ya con Rojas y Villalva en la cancha, pero no logró desequilibrar y apenas se arrimó con centros sin destino y un derechazo de Canales que pasó cerca del palo derecho de Marchesín. Hubiese sido injusto. En definitiva, Lanús fue más, ganó merecidamente y hundió un poco más al Millonario.
El mediocampista (PT 40m) anotó el único tanto con el que el Granate superó como local al Millonario, en el cierre de la duodécima fecha. El dueño de casa fue mucho más y desperdició chances muy claras. El equipo de Astrada volvió a dejar una pálida imagen.
Siempre se puede estar peor. River volvió a dejar una imagen muy pobre en la duodécima fecha del torneo Clausura y sufrió su tercera derrota consecutiva, esta vez frente a Lanús, en la Fortaleza y por 1-0. ¿Resultado justo? No. El equipo de Zubeldía debería haber anotado al menos un gol más ante un rival sin juego colectivo ni arrestos individuales. El elenco granate tomó rápidamente la iniciativa en el arranque del encuentro y comenzó a generar movimientos interesantes en ataque desde los pies de Blanco, inquieto y veloz sobre el sector izquierdo, y a partir de la movilidad del juvenil Leandro Díaz. Ya a los cuatro minutos, el mediocampista tiró un centro a media altura y Cabral evitó el primero en el área chica. Por su parte, el Millonario mostró los mismos problemas: en ataque generó muy poco, en el medio careció de presión y precisión y atrás acumuló errores garrafales. Justamente, a los diez, la última línea salió mal y Salcedo la tiró por arriba. Y a los 12, falló nuevamente la zaga, Salcedo quedó mano a mano con Vega y, en lugar de definir, se la entregó a Díaz, quien estaba adelantado. Al conjunto visitante le costó hacer equilibrio en cada sector de la cancha y el local generó riesgo tanto por derecha como por izquierda. Además, probó con algunos remates de larga distancia de Díaz, en dos ocasiones, y de Pizarro, aunque sin suerte. River estaba para el cachetazo y Zubeldía se lamentaba desde el banco por las oportunidades desperdiciadas. Sin embargo, el fútbol se encargó de ponerle justicia al marcador a los 40. Aguirre metió un muy buen centro desde la derecha, Blanco saltó absolutamente solo en el área y cabeceó al arco sin tanta potencia, Vega dio un rebote corto e injustificado y el 10, como si estuviera en un entrenamiento, tomó nuevamente el balón y definió ante la atenta mirada de los defensores. Lanús bajó la intensidad en el comienzo del segundo periodo y perdió esta frescura que había mostrado en la primera parte. Por eso, el Millonario se acomodó mejor, adelantó sus líneas y se acercó al área de Marchesín. Pero sólo se acercó, porque le costó muchísimo encontrar precisión en tres cuartos y poner cara a cara a algún jugador de ataque. A los 16, Funes Mori aprovechó una mala salida de la defensa local y encaró sin marca, pero se apuró y finalmente remató sin dirección desde la puerta del área. El Granate eligió atrincherarse y aprovechar con la velocidad de sus hombres de punta los espacios que dejaba el elenco de Núñez. Por eso, tuvo las mejores ocasiones. A los 35, Velázquez llegó hasta el fondo y tiró un excelente centro para la llegada en absoluta soledad de Salcedo, quien le dio de derecha y estrelló la pelota en el poste. Y a los 39, Blanco se escapó entre los centrales, se perfiló para su pierna más hábil y la tiró muy lejos ante la salida de Vega. Lanús no lo definía y sufría, únicamente porque sobre el final se replegó demasiado. El conjunto de Astrada fue, ya con Rojas y Villalva en la cancha, pero no logró desequilibrar y apenas se arrimó con centros sin destino y un derechazo de Canales que pasó cerca del palo derecho de Marchesín. Hubiese sido injusto. En definitiva, Lanús fue más, ganó merecidamente y hundió un poco más al Millonario.
Fecha 12 : Godoy Cruz 2 Velez 0
Godoy Cruz ganó un partido clave y sigue de cerca a Independiente
El Tomba derrotó como local a Vélez por 2-0 y se mantuvo a tres puntos del Rojo, que ayer había estirado la diferencia con el triunfo sobre Arsenal. Los goles los hicieron Salinas (ST 26m) y Carranza (ST 28m). El Fortín presentó un equipo alternativo.
Godoy Cruz derrotó como local a Vélez por 2-0, en un partido correspondiente a la 12ª fecha del Torneo Clausura. El Tomba consiguió un triunfo clave en su sueño de lograr el título, mientras que el Fortín -presentó una formación alternativa- quedó lejos de la pelea por la consagración. El primer tiempo fue muy entretenido, con un ida y vuelta electrizante de dos equipos ambiciosos que también tienen buen juego. No por casualidad pelean por el título en el campeonato y los de Ricardo Gareca también tienen como objetivo quedarse con la Copa Libertadores. La iniciativa fue del conjunto que dirige Omar Asad, que tuvo más situaciones que su rival. Las más claras fueron un anticipo de cabeza de Nicolás Olmedo tras un corner desde la izquierda que salió cerca y un remate desde afuera de Carlos Sánchez que se fue apenas desviado. La visita no llegó tanto como los mendocinos, pero tuvo las ocasiones más certeras. Entre ellas, un derechazo cruzado de Gastón Díaz que Nelson Ibáñez sacó al tiro de esquina y una situación increíble en la que Rolando Zárate definió por arriba del travesaño cuando tenía todo el arco libre. En el complemento las cosas no cambiaron demasiado: Godoy Cruz continuó su búsqueda y contó con un nuevo intento de Sánchez que contuvo Marcelo Barovero. La respuesta de Vélez fue un mano a mano de Juan Manuel Martínez que Jorge Curbelo alcanzó a salvar casi sobre la línea. A los 26 minutos llegó la apertura del marcador con un remate certero del recién ingresado Rodrigo Salinas. De un lateral que se hizo rápido apareció Olmedo para meter un buscapié que se encontró con el latigazo letal del delantero y el arquero no pudo hacer nada para evitar la caída de su arco. El gol golpeó muy duro al Fortín, que antes de poder intentar la remontada sufrió el segundo cachetazo. El reloj marcaba los 28 cuando el Tomba salió con una contra perfecta que terminó con el pase de Federico Higuaín a César Carranza y la definición ante la salida de Barovero. La historia ya estaba liquidada, no había tiempo para el milagro. Sólo para que Ibañez se convirtiera en figura al ahogarles el grito a Hernán López y Zárate, en los intentos de los de Liniers por encontrar el descuento que les permitiera seguir con vida en Mendoza.El triunfo hizo que Godoy Cruz registrara su primera victoria sobre Vélez en la historia (jugaron seis partidos) y quedara a tres puntos de Independiente. La derrota dejó a Vélez muy lejos de la pelea con el Rojo: a ocho unidades y con siete encuentros para que finalice el certamen.
El Tomba derrotó como local a Vélez por 2-0 y se mantuvo a tres puntos del Rojo, que ayer había estirado la diferencia con el triunfo sobre Arsenal. Los goles los hicieron Salinas (ST 26m) y Carranza (ST 28m). El Fortín presentó un equipo alternativo.
Godoy Cruz derrotó como local a Vélez por 2-0, en un partido correspondiente a la 12ª fecha del Torneo Clausura. El Tomba consiguió un triunfo clave en su sueño de lograr el título, mientras que el Fortín -presentó una formación alternativa- quedó lejos de la pelea por la consagración. El primer tiempo fue muy entretenido, con un ida y vuelta electrizante de dos equipos ambiciosos que también tienen buen juego. No por casualidad pelean por el título en el campeonato y los de Ricardo Gareca también tienen como objetivo quedarse con la Copa Libertadores. La iniciativa fue del conjunto que dirige Omar Asad, que tuvo más situaciones que su rival. Las más claras fueron un anticipo de cabeza de Nicolás Olmedo tras un corner desde la izquierda que salió cerca y un remate desde afuera de Carlos Sánchez que se fue apenas desviado. La visita no llegó tanto como los mendocinos, pero tuvo las ocasiones más certeras. Entre ellas, un derechazo cruzado de Gastón Díaz que Nelson Ibáñez sacó al tiro de esquina y una situación increíble en la que Rolando Zárate definió por arriba del travesaño cuando tenía todo el arco libre. En el complemento las cosas no cambiaron demasiado: Godoy Cruz continuó su búsqueda y contó con un nuevo intento de Sánchez que contuvo Marcelo Barovero. La respuesta de Vélez fue un mano a mano de Juan Manuel Martínez que Jorge Curbelo alcanzó a salvar casi sobre la línea. A los 26 minutos llegó la apertura del marcador con un remate certero del recién ingresado Rodrigo Salinas. De un lateral que se hizo rápido apareció Olmedo para meter un buscapié que se encontró con el latigazo letal del delantero y el arquero no pudo hacer nada para evitar la caída de su arco. El gol golpeó muy duro al Fortín, que antes de poder intentar la remontada sufrió el segundo cachetazo. El reloj marcaba los 28 cuando el Tomba salió con una contra perfecta que terminó con el pase de Federico Higuaín a César Carranza y la definición ante la salida de Barovero. La historia ya estaba liquidada, no había tiempo para el milagro. Sólo para que Ibañez se convirtiera en figura al ahogarles el grito a Hernán López y Zárate, en los intentos de los de Liniers por encontrar el descuento que les permitiera seguir con vida en Mendoza.El triunfo hizo que Godoy Cruz registrara su primera victoria sobre Vélez en la historia (jugaron seis partidos) y quedara a tres puntos de Independiente. La derrota dejó a Vélez muy lejos de la pelea con el Rojo: a ocho unidades y con siete encuentros para que finalice el certamen.
Fecha 12 : Boca 1 Central 2
Boca recibió un nuevo cachetazo y Central alimentó su ilusión
El Canalla ganó por 2-1 en el debut de Madelón y cortó una racha de 20 años sin victorias en la Bombonera. La visita abrió la cuenta con un gol de De León (PT 43m), empató Gaitán (ST 15m) y Caraglio (ST 40m) decretó el triunfo. Fue expulsado Riquelme.
Boca cayó como local ante Rosario Central por 2-1. El Xeneize profundizó un poco más sus problemas y el Canalla, con el debut de Leonardo Madelón en la dirección técnica, sumó tres puntos clave en su lucha por salir de la zona de Promoción (superó a Racing en unidades, pero no en el promedio). En el primer tiempo, el equipo que dirige Abel Alves tuvo el control de la pelota y careció de ideas para inquietar a Hernán Galíndez. No contó con ninguna llegada al arco y sólo preocupó con centros aislados en la búsqueda de un cabezazo salvador de Martín Palermo. Los rosarinos se mostraron ordenados, no sufrieron sobresaltos y apostaron a la contra. Antes de abrir el marcador, generó tres chances claras: Mario Paglialunga sacó un remate que salió cerca y más tarde exigió a Javier García, mientras que Jonathan Gómez hizo lucir al arquero. A los 43 minutos, y de un tiro de esquina desde la izquierda, llegó el gol de Rosario Central. Un nuevo desconcierto defensivo de Boca en el juego aéreo le permitió a Guillermo Burdisso cabecear y Adrián De León, casi sobre la línea, se vio beneficiado con un rebote en su cuerpo que terminó en la red. En el complemento las cosas no cambiaron. El técnico local metió a Cristian Chávez por Luiz Alberto pero mantuvo la línea de cuatro defensores con el retroceso de Gary Medel, quien luego se retiró con una lesión en la rodilla derecha (ingresó Cristian Erbes, como lateral derecho).En una ráfaga en la que el Xeneize pareció despertarse llegó el empate. El reloj marcaba 15 minutos cuando Juan Román Riquelme hizo una buena pared con el Pochi y, luego del rebote del arquero ante el remate del enganche, apareció Nicolás Gaitán para empujarla. El gol fue un envión anínico para los de Alves, que pudieron haber dado vuelta el resultado. Sin embargo, una nueva distracción defensiva y un horror de García en la salida le permitieron a la visita llevarse la victoria de la Bombonera a los 40 y con un cabezazo de Milton Caraglio.El tanto había llegado de una falta inexistente que Rafael Furchi le cobró a Chávez. Las protestas de Riquelme, quien había tenido un primer tiempo con imprecisiones y una segunda mitad un poco más correcta, llevaron al árbitro a amonestarlo y luego mostrarle la tarjeta roja. Ya no quedaba tiempo: ni los remates desde afuera de Jesús Méndez, flojo en la marca y auspicioso con sus disparos desde lejos, ni un cabezazo de Palermo fueron suficientes para cambiar la historia. El delantero tuvo poca participación y sigue sin poder hacer el gol 219.La caída fue un nuevo golpe para Boca, ahora anteúltimo en las posiciones, y Alves, quien parece estar cada vez más perdido en su cargo. El triunfo de Rosario Central cortó con una racha de 20 años sin victorias en la Bombonera y encendió la ilusión para mantener la categoría.
El Canalla ganó por 2-1 en el debut de Madelón y cortó una racha de 20 años sin victorias en la Bombonera. La visita abrió la cuenta con un gol de De León (PT 43m), empató Gaitán (ST 15m) y Caraglio (ST 40m) decretó el triunfo. Fue expulsado Riquelme.
Boca cayó como local ante Rosario Central por 2-1. El Xeneize profundizó un poco más sus problemas y el Canalla, con el debut de Leonardo Madelón en la dirección técnica, sumó tres puntos clave en su lucha por salir de la zona de Promoción (superó a Racing en unidades, pero no en el promedio). En el primer tiempo, el equipo que dirige Abel Alves tuvo el control de la pelota y careció de ideas para inquietar a Hernán Galíndez. No contó con ninguna llegada al arco y sólo preocupó con centros aislados en la búsqueda de un cabezazo salvador de Martín Palermo. Los rosarinos se mostraron ordenados, no sufrieron sobresaltos y apostaron a la contra. Antes de abrir el marcador, generó tres chances claras: Mario Paglialunga sacó un remate que salió cerca y más tarde exigió a Javier García, mientras que Jonathan Gómez hizo lucir al arquero. A los 43 minutos, y de un tiro de esquina desde la izquierda, llegó el gol de Rosario Central. Un nuevo desconcierto defensivo de Boca en el juego aéreo le permitió a Guillermo Burdisso cabecear y Adrián De León, casi sobre la línea, se vio beneficiado con un rebote en su cuerpo que terminó en la red. En el complemento las cosas no cambiaron. El técnico local metió a Cristian Chávez por Luiz Alberto pero mantuvo la línea de cuatro defensores con el retroceso de Gary Medel, quien luego se retiró con una lesión en la rodilla derecha (ingresó Cristian Erbes, como lateral derecho).En una ráfaga en la que el Xeneize pareció despertarse llegó el empate. El reloj marcaba 15 minutos cuando Juan Román Riquelme hizo una buena pared con el Pochi y, luego del rebote del arquero ante el remate del enganche, apareció Nicolás Gaitán para empujarla. El gol fue un envión anínico para los de Alves, que pudieron haber dado vuelta el resultado. Sin embargo, una nueva distracción defensiva y un horror de García en la salida le permitieron a la visita llevarse la victoria de la Bombonera a los 40 y con un cabezazo de Milton Caraglio.El tanto había llegado de una falta inexistente que Rafael Furchi le cobró a Chávez. Las protestas de Riquelme, quien había tenido un primer tiempo con imprecisiones y una segunda mitad un poco más correcta, llevaron al árbitro a amonestarlo y luego mostrarle la tarjeta roja. Ya no quedaba tiempo: ni los remates desde afuera de Jesús Méndez, flojo en la marca y auspicioso con sus disparos desde lejos, ni un cabezazo de Palermo fueron suficientes para cambiar la historia. El delantero tuvo poca participación y sigue sin poder hacer el gol 219.La caída fue un nuevo golpe para Boca, ahora anteúltimo en las posiciones, y Alves, quien parece estar cada vez más perdido en su cargo. El triunfo de Rosario Central cortó con una racha de 20 años sin victorias en la Bombonera y encendió la ilusión para mantener la categoría.