Paraguay empató y se adjudicó el Grupo F
El elenco conducido por Gerardo Martino igualó 0-0 con Nueva Zelanda y finalizó primero en la zona con cinco puntos, uno más que Eslovaquia, la gran sorpresa. En octavos de final se las verá con el segundo del E, Holanda, Dinamarca o Japón.
Al igual que Argentina y Uruguay -Brasil está muy cerca y Chile tiene su chance-, Paraguay dio muestras de la supremacía sudamericana en la primera fase del Mundial de Sudáfrica y se quedó con el Grupo F luego de empatar 0-0 con Nueva Zelanda, que se fue del torneo sin perder. De esta manera, enfrentará a Holanda, Dinamarca o Japón.
El conjunto guaraní tomó la iniciativa y el control de la pelota en el comienzo del partido, aunque careció de sorpresa y velocidad en ofensiva para complicar a la última línea del elenco oceánico, que se defendió bien y apostó al contragolpe, aunque tampoco logró inquietar. Nelson Valdez se mostró inquieto, pero no pudo desequilibrar.
Con el correr de los minutos, el cotejo se hizo áspero y trabado en el medio. A los dos les costó mucho superar con pelota dominada los tres cuartos de cancha y no hubo llegadas claras. Denis Caniza probó desde afuera del área en dos ocasiones y sus disparos se perdieron por arriba del travesaño, sin complicar al arquero Mark Paston.
Por su parte, los All White, esta tarde vestidos de negro, trataron de inquietar por arriba con algunos centros cruzados y un par de tiros de esquina, pero jamás pusieron en peligro el arco defendido por Justo Villar. Poco, realmente poco de ambos en una de las peores primeras etapas del torneo.
Paraguay mejoró en el complemento y fue claro dominador ante un rival que jamás lo inquieto, pese a que debía arriesgar para ilusionarse con los octavos de final. A los 16, Caniza tiró el centro, Riveros cabeceó y Paston salvó a su equipo, Víctor Cáceres tomó el rebote y disparó desviado, en la primera clara del encuentro.
El equipo de Martino siguió con la pelota en su poder, aunque tardó en volver a inquietar a una defensa muy dura, que se equivocó poco y sacó todo. A los 30, Edgar Benítez formó una buena atajada del uno y Barrios no logró empujarla en el rebote. Y a los 32, Santa Cruz se llevó un rebote y no llegó a tiempo para puntearla ante el arquero.
Sobre el final, Nueva Zelanda metió mucha gente en el área guaraní, pero tampoco puso en peligro el arco de Villar, quien pasó inadvertido. En definitiva, Paraguay logró el objetivo y los All White cumplieron un papel muy digno y se fue de la copa sin derrotas, algo inesperado.
El elenco conducido por Gerardo Martino igualó 0-0 con Nueva Zelanda y finalizó primero en la zona con cinco puntos, uno más que Eslovaquia, la gran sorpresa. En octavos de final se las verá con el segundo del E, Holanda, Dinamarca o Japón.
Al igual que Argentina y Uruguay -Brasil está muy cerca y Chile tiene su chance-, Paraguay dio muestras de la supremacía sudamericana en la primera fase del Mundial de Sudáfrica y se quedó con el Grupo F luego de empatar 0-0 con Nueva Zelanda, que se fue del torneo sin perder. De esta manera, enfrentará a Holanda, Dinamarca o Japón.
El conjunto guaraní tomó la iniciativa y el control de la pelota en el comienzo del partido, aunque careció de sorpresa y velocidad en ofensiva para complicar a la última línea del elenco oceánico, que se defendió bien y apostó al contragolpe, aunque tampoco logró inquietar. Nelson Valdez se mostró inquieto, pero no pudo desequilibrar.
Con el correr de los minutos, el cotejo se hizo áspero y trabado en el medio. A los dos les costó mucho superar con pelota dominada los tres cuartos de cancha y no hubo llegadas claras. Denis Caniza probó desde afuera del área en dos ocasiones y sus disparos se perdieron por arriba del travesaño, sin complicar al arquero Mark Paston.
Por su parte, los All White, esta tarde vestidos de negro, trataron de inquietar por arriba con algunos centros cruzados y un par de tiros de esquina, pero jamás pusieron en peligro el arco defendido por Justo Villar. Poco, realmente poco de ambos en una de las peores primeras etapas del torneo.
Paraguay mejoró en el complemento y fue claro dominador ante un rival que jamás lo inquieto, pese a que debía arriesgar para ilusionarse con los octavos de final. A los 16, Caniza tiró el centro, Riveros cabeceó y Paston salvó a su equipo, Víctor Cáceres tomó el rebote y disparó desviado, en la primera clara del encuentro.
El equipo de Martino siguió con la pelota en su poder, aunque tardó en volver a inquietar a una defensa muy dura, que se equivocó poco y sacó todo. A los 30, Edgar Benítez formó una buena atajada del uno y Barrios no logró empujarla en el rebote. Y a los 32, Santa Cruz se llevó un rebote y no llegó a tiempo para puntearla ante el arquero.
Sobre el final, Nueva Zelanda metió mucha gente en el área guaraní, pero tampoco puso en peligro el arco de Villar, quien pasó inadvertido. En definitiva, Paraguay logró el objetivo y los All White cumplieron un papel muy digno y se fue de la copa sin derrotas, algo inesperado.
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