Boca se durmió y se le escapó el triunfo ante Estudiantes
Fue 1-1, en la Bombonera. El Xeneize ganaba con un penal de Martín Palermo (PT 25m), entró en un letargo y el Pincha, de contra, se lo empató en el descuento mediante Leandro González (ST 46m).
Boca estuvo a un paso de volver esta noche al triunfo. Vencía a Estudiantes en la Bombonera en tiempo cumplido y se acercaba el pitazo final de Juan Pablo Pompei. Pero en una contra se le esfumó el resultado que tanto tranquilizaba las aguas. Al final fue un 1-1 que castigó duramente a los de Abel Alves por no haber insistido en sus momentos más favorables y premió la solidez del Pincha, que no jugó un buen partido pero supo esperar con solvencia el momento justo para dar el zarpazo. Después de un inicio de ida y vuelta, el conjunto xeneize se afianzó en el primer tiempo con la movilidad que consiguió por la derecha mediante Gary Medel (salió en el complemento con una lumbalgia producto de una caída en las escaleras del vestuario tras el descanso), Jesús Méndez y Nicolás Gaitán, este último especialmente peligroso junto a un adelantado Juan Riquelme. Román fue el primero en avisar con un tiro libre que tapó Agustín Orión, y enseguida el Pincha respondió con una aparición de Leandro González por izquierda que ahogó Javier García. Después, todas las situaciones fueron xeneizes: Riquelme y Gaitán llegaron por derecha pero remataron afuera y, a los 23 minutos, llegó el error del juez: Martín Palermo quiso mandar un centro desde la izquierda que pegó accidentalmente en el brazo de Leandro Desábato, lo que motivó a Pompei a cobrar penal. Después de un tiro de Palermo que besó la red pero fue anulado por invasión, el Loco no falló con un disparo al medio que pegó en las piernas de Orión y terminó adentro a los 25. A partir de entonces, el desarrollo perdió ritmo y, aunque dominaba, el local ya no fue tan incisivo. Apenas cerca del descanso Palermo sacudió la modorra en una incursión por derecha que desembocó en un tiro alto.El complemento tuvo a Boca dormido. Los de la Ribera se olvidaron de Riquelme, se retrasaron metros y le cedieron el dominio a su rival, que sin embargo tampoco encontraba el camino y extrañaba demasiado a Juan Sebastián Verón. García apenas si tuvo trabajo en un período aburrido que parecía encaminarse hacia un apacible triunfo local, pero... A los 46 minutos, el León encontró la contra que tanto había estado esperando. González corrió entre los dos centrales y, cuando el arquero salía, lo ajustició con un disparo alto y fuerte que se convirtió en el empate que dejó muda a La Ribera. Para colmo, enseguida, el ingresado Jerónimo Morales Neumann casi lo da vuelta con un intento desviado. En unos minutos, todo lo que el Xeneize creía asegurado tambaleó seriamente. Pero no hubo tiempo para más. Suficiente había sido la emoción para Estudiantes y el sufrimiento para Boca, que nuevamente se condenaba a un futuro inmediato en la turbulencia. Y esta vez sintiendo que la paz se le había escapado de las manos.
Fue 1-1, en la Bombonera. El Xeneize ganaba con un penal de Martín Palermo (PT 25m), entró en un letargo y el Pincha, de contra, se lo empató en el descuento mediante Leandro González (ST 46m).
Boca estuvo a un paso de volver esta noche al triunfo. Vencía a Estudiantes en la Bombonera en tiempo cumplido y se acercaba el pitazo final de Juan Pablo Pompei. Pero en una contra se le esfumó el resultado que tanto tranquilizaba las aguas. Al final fue un 1-1 que castigó duramente a los de Abel Alves por no haber insistido en sus momentos más favorables y premió la solidez del Pincha, que no jugó un buen partido pero supo esperar con solvencia el momento justo para dar el zarpazo. Después de un inicio de ida y vuelta, el conjunto xeneize se afianzó en el primer tiempo con la movilidad que consiguió por la derecha mediante Gary Medel (salió en el complemento con una lumbalgia producto de una caída en las escaleras del vestuario tras el descanso), Jesús Méndez y Nicolás Gaitán, este último especialmente peligroso junto a un adelantado Juan Riquelme. Román fue el primero en avisar con un tiro libre que tapó Agustín Orión, y enseguida el Pincha respondió con una aparición de Leandro González por izquierda que ahogó Javier García. Después, todas las situaciones fueron xeneizes: Riquelme y Gaitán llegaron por derecha pero remataron afuera y, a los 23 minutos, llegó el error del juez: Martín Palermo quiso mandar un centro desde la izquierda que pegó accidentalmente en el brazo de Leandro Desábato, lo que motivó a Pompei a cobrar penal. Después de un tiro de Palermo que besó la red pero fue anulado por invasión, el Loco no falló con un disparo al medio que pegó en las piernas de Orión y terminó adentro a los 25. A partir de entonces, el desarrollo perdió ritmo y, aunque dominaba, el local ya no fue tan incisivo. Apenas cerca del descanso Palermo sacudió la modorra en una incursión por derecha que desembocó en un tiro alto.El complemento tuvo a Boca dormido. Los de la Ribera se olvidaron de Riquelme, se retrasaron metros y le cedieron el dominio a su rival, que sin embargo tampoco encontraba el camino y extrañaba demasiado a Juan Sebastián Verón. García apenas si tuvo trabajo en un período aburrido que parecía encaminarse hacia un apacible triunfo local, pero... A los 46 minutos, el León encontró la contra que tanto había estado esperando. González corrió entre los dos centrales y, cuando el arquero salía, lo ajustició con un disparo alto y fuerte que se convirtió en el empate que dejó muda a La Ribera. Para colmo, enseguida, el ingresado Jerónimo Morales Neumann casi lo da vuelta con un intento desviado. En unos minutos, todo lo que el Xeneize creía asegurado tambaleó seriamente. Pero no hubo tiempo para más. Suficiente había sido la emoción para Estudiantes y el sufrimiento para Boca, que nuevamente se condenaba a un futuro inmediato en la turbulencia. Y esta vez sintiendo que la paz se le había escapado de las manos.
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